La vida es el producto de nuestras decisiones. Todos tenemos que tomar decisiones, aunque no lo querramos. Posponer una decisión o no tomarla es también una decisión: es la decisión de dejar todo en el estado en el que estaba. Normalmente cuanto mas alternativas tenemos, mas nos cuesta tomar la decisión... | | | Frecuentemente me asombro de los efectos que tienen cada una de las pequeñas decisiones que tomamos día a día. Es muy simple comprender porqué a muchas personas no les gusta tomar decisiones: es inquietante saber que a partir del momento de tomar la decisión, una situación pudiera cambiar considerablemente. Mucho mayor es aún el miedo a la equivocación. | En este cuadro he tratado de reflejar esta verdad. | |
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